El director general de los Italianos en el Mundo, Luigi Vignali, fue nombrado enviado especial de la diplomacia de Italia para mediar por los detenidos italianos en Venezuela.
En ese sentido, viajó a Caracas para abordar el caso de algunos presos, entre ellos Alberto Trentini, quien tiene casi nueve meses detenido por motivos aún no esclarecidos.
Sin embargo, no fue recibido por las autoridades del gobierno de Nicolás Maduro. Llegó hace algunos días a la capital del país y no pudo reunirse con funcionarios venezolanos ni con otros delegados dispuestos a negociar.
Ante esto, Luigi Vignali regresó a Roma, pero se espera «un nuevo intento en breve», reseñó el diario Corriere della Sera.
REPRESENTANTE DE ITALIA VIAJÓ A VENEZUELA
«Reconocemos que la misión del enviado del Ministerio de Relaciones Exteriores a Venezuela se ha pospuesto, pero confiamos en que el diálogo pueda continuar», dice un comunicado emitido este miércoles por la familia de Trentini junto con su abogada, Alessandra Ballerini.
Asimismo, acotaron que Alberto Trentini debe regresar a casa. «Confiamos en el compromiso de nuestra diplomacia y renovamos nuestro respeto y gratitud al embajador Vignali, quien esperamos pueda viajar pronto a Venezuela».
Al tiempo que reiteraron que él trabaja para la ONG Humanity & Inclusion y se encuentra detenido desde el 15 de noviembre.
Alberto Trentini está acusado de conspiración, según varios medios, y se encuentra recluido en la cárcel El Rodeo I, ubicada en el estado Miranda.
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Tras lo ocurrido, la portavoz en la Cámara de los Diputados del partido Alianza Verdes e Izquierda en Italia, Luana Zanella, pidió al ministro de Exteriores, Antonio Tajani, que explique las nuevas estrategias que se tomarán con respecto a los casos de los italianos detenidos en Venezuela.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos solicitó el pasado mes de enero al gobierno venezolano que garantizara su integridad física y psicológica.
Sin embargo, lo que se conoce es que ha podido llamar a su madre, Armanda Colusso, solo dos veces. La primera en mayo y la segunda el 26 de julio. En la última indicó que estaba bien, pero agotado por el régimen penitenciario, reseñó EFE.
