El médico pediatra y epidemiólogo, Alejandro Rísquez, hizo un llamado a los padres y representantes y a la propia población estudiantil, a reforzar el esquema de vacunación aprovechando el regreso a clases.
Manifestó que continuamos en pandemia y las medidas preventivas deben ser practicadas luego de la experiencia vivida por el mundo entero en los últimos años.
Rísquez manifestó la importancia de mantener los espacios limpios y saneados y que exista en cada ciudad del país una recolección sistemática de residuos sólidos para garantizar un mejor control epidemiológico, debido a que la carencia o déficit de este servicio produce estragos en nuestro medio ambiente.
«La población de zamuros ha aumentado de manera importante. Los zamuros son carroñeros, es decir, buscan alimentos en estado de descomposición en las calles o avenidas, que son característicos de los desechos orgánicos que se generan en las viviendas y restaurantes», puntualizó Rísquez, indicando que la presencia de estas aves es indicador de la acumulación indebida de residuos en la ciudad, y «la contaminación por la basura es un problema de salud pública de gran envergadura porque conlleva una serie de vectores de enfermedades infecciosas: insectos, roedores principalmente».
El Dr. Rísquez destacó la importancia del control epidemiológica de, por ejemplo, las moscas, por ser estas vehículo para transmitir enfermedades rápidamente dada su acelerada tasa de reproducción y la migración constante de estos insectos desde los basurales hasta los hogares, donde contaminan los alimentos.
El también profesor de epidemiología de la UCV explicó que Caracas y las principales ciudades del país tienen alta presencia de ratas debido a la acumulación de desechos, bien sea por no colocar los residuos en los sitios donde los camiones del aseo deben recogerlos, o porque estos no lo recogen de manera frecuente.
«La basura se ha convertido en un problema de larga data que no se ha resuelto, sobre todo en zonas urbanas populares. En estas zonas, donde la recolección de residuos es irregular por razones diversas, la acumulación de basura se convierte en foco de infecciones, de contaminación y en origen de producir epidemias importantes» agregó.
Para Rísquez el tema de la basura puede convertirse en uno de los problemas más graves de la salud pública.
Recomienda a los ciudadanos estar informados para promover e implementar mecanismos efectivos de prevención, a través del control de la proliferación de animales vectores asociados a la acumulación de residuos.
Por último, el Dr. Alejandro Rísquez hizo un llamado a las autoridades competentes para que, junto la ciudadanía, sean factor decisivo en la salud pública, gracias a, entre otras medidas, la prestación de un servicio adecuado de recolección y eliminación de desechos.
SI HIPÓCRATES ESTUVIERA VIVO…
A lo largo de la historia, los seres humanos han tratado de vivir en ciudades para protegerse de distintas amenazas, entre ellas las enfermedades y epidemias.
El profesor de Salud Pública de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Gustavo Villasmil, argumentó que ya en la Antigua Grecia, y en Roma y París, luego de la Edad Media, ya se habían implementado las primeras prácticas de saneamiento ambiental y control de plagas que hoy son la base técnica para la prevención moderna de enfermedades y epidemias y del resguardo ambiental.
El Dr. Villasmil recordó que las ciudades se amurallaban en Europa por seguridad física y también para resguardar su sanidad. Mencionó el doctor como ejemplo el documento epidemiológico más antiguo que porviene de Salerno, Italia, de la escuela de Medicina más antigua del mundo occidental -fundada en el siglo IX-; para regular el vertido de aguas y residuos: «Se llegó a decir que París se podía oler a kilómetros por la peste que emanaba. Eso estimuló la adopción de rigurosos controles sanitarios».
Villasmil, también médico internista, enumeró algunas de las acciones realizadas en estas ciudades antiguas en aras de la medicina y el control sanitario: las aguas se disponían a una hora específica; la basura a otra y los enfermos se aislaban. Estas prácticas se adoptaron luego en Latinoamérica.
«Nuestro país es una invención de Carlos III. En 1777 se crea la Capitanía General de Venezuela y ese mismo año se crea el «General Protomedicato». Esta institución era la responsable de la limpieza de los alimentos, de los enfermos (…) para hacer de la ciudad un espacio de salud».
El investigador de la UCV señaló que la evidencia del deterioro de esa política de saneamiento ambiental, necesaria para preservar la salud de los ciudadanos, se ve, por ejemplo, en la ciudad de Caracas. «En cualquier esquina se observan cerros de basura o lo que es peor aún, se encuentra a familias enteras viviendo en el basural».
Villasmil también explicó que las interrogantes que se hace la población sobre la diarrea por salmonella, fiebre tifoidea y la reaparición de enfermedades que se creían erradicadas, tienen su respuesta porque la variable ambiental ha sido afectada con agentes contaminantes, en este caso la basura acumulada en las ciudades.
El profesor universitario explicó que Hipócrates de Cos, a finales del siglo V e inicios del siglo IV a.C., decía en sus Tratados Hipocráticos que los médicos que iban a una nueva ciudad lo primero que tenían que hacer es cuidar y velar por el ambiente.
En la observación del ambiente puede estar la explicación del origen de las enfermedades de los habitantes de esa ciudad.
«Si Hipócrates viniera y observara algún sector del oeste de Caracas no le parecería difícil determinar el origen de los problemas de salud de sus habitantes. Yo he visto pasar ratas del tamaño de un que viven de las basuras amontonadas que no se recogen; son áreas con abundante maleza y residuos acumulados que sirven de criadero para insectos y otros vectores o transmisores de enfermedades».
Agregó el Doctor que entre los vectores que hay en Caracas está el del paludismo, y denunció lo que describe como paludismo urbano. «Alguna vez pensé que el paludismo había quedado atrás y para las ‘Casas Muertas’ de Miguel Otero Silva en Ortiz, pero no: hay paludismo en las ciudades intermedias del oriente del Estado Miranda y en Los Valles del Tuy».
El médico describe que muchos de los portadores vinieron de las minas que abundan en el Arco Minero del Orinoco, Estado Bolívar. Desesperados, en desempleo, deciden desempeñar esa actividad y luego regresan contagiados. «Nuestra ciudad le sirve el ambiente en bandeja de plata al mosquito Anopheles para que reparta el Plasmodium malariae por doquier».
El doctor Villasmil alerta que ya el riesgo de contraer malaria no se limita a la selva. Los casos detectados en Los Valles del Tuy, donde vive un tercio de la población que hace vida en el área metropolitana, puede significar un riesgo si no se hace el saneamiento respectivo y el control epidemiológico.
«Estoy hablando desde Caracas, que fue una de las primeras ciudades de Iberoamérica que tuvo servicios sanitarios integrales. Es notorio ver cómo nuestras grandes ciudades, hablo de Caracas; Maracaibo; Valencia, fueron perdiendo las características de aquello que las hizo ciudad: agua, recolección de basura… eso es muy grave», resaltó Villasmil.
En nuestra tercera y última entrega sobre saneamiento ambiental en Venezuela abordaremos las infecciones respiratorias por la quema de basura. Con el médico médico pediatra e intensivista, Huníades Urbina, se explicará las consecuencias de esta práctica frecuente a lo largo del territorio nacional en: ¡Enfermos por tanta basura!: Asfixiados por la quema.
Héctor Luis Caldera