El regreso a clases en Estados Unidos se convirtió en un evento significativo no solo para los estudiantes, sino también para las finanzas de las familias.
Este año, el gasto promedio por hogar ha alcanzado los 874.68 dólares, según la Federación Nacional de Minoristas (NRF, por sus siglas en inglés), una cifra considerable pese a la disminución de la inflación.
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Se trata del segundo presupuesto más elevado desde que se lleva el registro. El más alto se registró en el 2023, cuando se necesitó más 890 dólares por familia para cubrir la totalidad de los gastos.
En este sentido, aunque la inflación ha mostrado signos de desaceleración, los consumidores siguen siendo cautelosos con sus gastos. Muchas familias están optando por buscar ofertas y descuentos para reducir el impacto financiero del regreso a clases.
Las tiendas y plataformas en línea han respondido a esta demanda ofreciendo promociones especiales y descuentos en útiles escolares, ropa y tecnología, elementos esenciales para el regreso a clases.
El desglose del gasto reveló, de acuerdo a diversas fuentes consultadas por medios locales, que una parte significativa del presupuesto se destina a la compra de tecnología y útiles escolares.
Con el avance de la educación digital, dispositivos como laptops y tabletas se han vuelto indispensables para los estudiantes. Además, los útiles escolares tradicionales, como cuadernos, mochilas y lápices, siguen siendo una necesidad básica, contribuyendo al aumento del gasto total. Aunque todos han bajado de precio.
En contraste, el gasto en el regreso a clases también tiene un impacto positivo en la economía local. Las tiendas minoristas y los comercios en línea experimentan un incremento en sus ventas durante esta temporada, lo que a su vez genera empleo y dinamiza la economía.