Elon Musk, el magnate detrás de Tesla y SpaceX, ha vuelto a ser el centro de atención tras un gesto polémico durante un evento en el Capitolio de EEUU.
Durante su discurso en el Capitol One Arena, Musk realizó un gesto que muchos interpretaron como un saludo nazi.
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Este gesto ha generado una ola de críticas y reacciones en las redes sociales y en los medios de comunicación.
En respuesta a las críticas, Musk utilizó su red social X para defenderse. «Francamente, necesitan nuevos trucos. Cansa mucho ese ataque de que todo el mundo es Hitler», escribió en un mensaje.
Según él, su gesto fue simplemente un acto de agradecimiento hacia la multitud presente y no tenía ninguna connotación nazi.
Asimismo, la Liga Anti-Difamación (ADL), un observatorio de antisemitismo y derechos humanos, también intervino en el debate.
En un comunicado, la ADL calificó el gesto de Musk como «incómodo» y pidió cautela antes de sacar conclusiones precipitadas.
Sin embargo, algunos extremistas de derecha celebraron el gesto, lo que ha añadido más leña al fuego a la situación.
Lo cierto, es que diferentes expertos en comunicación y extremismo han ofrecido diversas opiniones sobre el incidente. Uno de ellos, es Jared Holt, analista de investigación senior en el Instituto para el Diálogo Estratégico, quien expresó, según el diario español El Mundo, su escepticismo sobre la intencionalidad del gesto de Musk, sugiriendo que podría haber sido un acto de autosabotaje.
«Sería un acto de autosabotaje que realmente no tendría mucho sentido», sostuvo. Holt señaló que Musk específicamente dijo que su corazón estaba con la multitud y eso podría indicar una especie de gesto de agradecimiento hacia ellos.
Por otro lado, Kurt Braddock, profesor de comunicación en la Universidad Americana, afirmó que el gesto era claramente un saludo fascista.
