La policía del condado de Nassau, en Nueva York (EEUU), recibió la autorización para disparar a los misteriosos drones que desde hace semanas sobrevuelan varias zonas del estado y los cercanos Nueva Jersey, Pensilvania y Maryland.
El ejecutivo del condado, Bruce Blakeman, declaró en una rueda de prensa que si hay una reunión masiva de personas y un avión no tripulado representa una amenaza, los agentes tienen la autoridad y el derecho a derribarlo.
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El comisario de policía del condado, Patrick J. Ryder, mencionó que su equipo cuenta con 30 de los mejores francotiradores del país, capaces de acertar a 400 metros de distancia.
Sin embargo, el FBI y la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) han recordado que disparar a drones o apuntarles con láseres constituye un delito federal.
Blakeman argumentó que la policía siempre ha tenido el derecho a detener un crimen. Sobre todo, si podría resultar en una gran pérdida de vidas o daños a viviendas.
Las autoridades de Nassau presentaron una nueva tecnología que permite detectar y rastrear drones, aunque reconocieron tener limitaciones y pidieron al gobierno federal proporcionar las herramientas necesarias para bloquearlos y enviarlos de vuelta a su base en lugar de tener que derribarlos.
En las últimas semanas, el FBI ha recibido más de 5.000 avisos de avistamientos de drones, aunque el Departamento de Defensa de EEUU descartó que estos aviones no tripulados representen un riesgo para la seguridad nacional y pública.
