Un video grabado el pasado 4 de julio reveló la rapidez con que las aguas desbordadas del río Llano arrasaron una carretera elevada en Kingsland, Texas.
La secuencia en timelapse documentó el instante exacto en que la inundación comenzó a desatarse, en cuestión de minutos, mientras familias celebraban el feriado del Día de la Independencia.
En la grabación, se observa como a las 17:15:20 la primera oleada cubre la calzada y apenas diez minutos después, el cauce crecido se expande varios metros. Un grupo de personas que contemplaba el aumento del nivel del agua tuvo que huir para no ser arrastrado por la corriente.
Las inundaciones dejaron al menos 82 personas fallecidas, incluidos 28 niños, según cifras confirmadas por CNN hasta el domingo por la noche. El condado de Kerr fue el más golpeado, con 68 víctimas mortales. El resto se distribuyó entre Travis (6), Burnet (3), Kendall (2), Williamson (2) y Tom Green (1).
El gobernador de Texas, Greg Abbott, informó que 41 personas seguían desaparecidas el domingo, mientras los equipos de rescate rastrean ríos y zonas anegadas con 17 helicópteros. La búsqueda se concentró especialmente en los alrededores del Camp Mystic, un campamento cristiano de verano donde más de 750 personas dormían cuando el río Guadalupe se desbordó durante la noche. El agua subió más de ocho metros, el equivalente a un edificio de dos pisos, en solo 45 minutos, anegando cabañas y arrastrando a varias niñas.
Un nuevo timelapse muestra cómo se desbordó el río Llano en Texas🇺🇸. En 120 segundos, lo que era tierra se convirtió en un río. pic.twitter.com/ybrpMVjOCQ
— Señor del caos visual (@_Holy3) July 6, 2025
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El fenómeno se produjo luego de que lluvias torrenciales cayeran en pocas horas sobre un suelo ya saturado. La región afectada, conocida como Flash Flood Alley, es propensa a inundaciones repentinas.
EL ANUNCIO DE TRUMP SOBRE TEXAS
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, calificó la tragedia como “una catástrofe de cada 100 años” que “nadie esperaba”, y anticipó que “probablemente” viajará a Texas el viernes. Además, firmó una declaración de desastre mayor que activa la intervención de FEMA y la asignación de fondos federales.
Entretanto, miles de voluntarios acudieron al condado de Kerr para colaborar en las labores de búsqueda y asistencia, aunque las autoridades solicitaron abstenerse de usar drones privados, ya que ponen en riesgo las operaciones aéreas de rescate.
El gobernador Abbott advirtió que el peligro persiste: “Las fuertes lluvias pueden desencadenar nuevas inundaciones repentinas en cualquier momento. Pedimos a la población que no se acerque a ríos crecidos ni a zonas inundadas.”
Mientras prosiguen los rescates, también se inició el complejo proceso de remoción de escombros. “Hay destrozos por todas partes que bloquean carreteras y retrasan la reconstrucción”, lamentó el gobernador.
