HORROR EN EEUU: El terrible ataque de unas ratas contra una bebé mientras dormía en su cuna, culpan a los padres

Luis Alfredo Ledezma
3 Min de Lectura
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Un escalofriante incidente ha conmocionado a la comunidad de Belton, Carolina del Sur (EEUU) tras la noticia de que una bebé de seis meses fue atacada por una rata de gran tamaño mientras dormía en su cuna.  
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Un escalofriante incidente ha conmocionado a la comunidad de Belton, en Carolina del Sur (EEUU), tras la noticia de que una bebé de seis meses fue atacada por una rata de gran tamaño mientras dormía en su cuna.  

De acuerdo con lo reportado por WYFF, la menor sufrió múltiples mordeduras en el rostro, brazos y nuca, lo que llevó a su hospitalización inmediata.  

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Su hermano gemelo también presentaba marcas de mordeduras en los pies, lo que sugiere que la presencia de roedores en la vivienda era un problema persistente. 

Lo que se detalló, es que las autoridades respondieron a una llamada de emergencia realizada por la madre de la bebé, quien alertó sobre el ataque.  

Al llegar a la vivienda, los agentes encontraron sangre en la cuna y evidencias de una infestación de ratas. La niña fue trasladada al Greenville Memorial Hospital, donde se encuentra en recuperación.  

Pero, la gravedad del caso, inmediatamente llevó a una investigación sobre las condiciones en las que vivían los menores. 

Los padres de la bebé, Akayla y Justin Bearden, de 24 años, admitieron que habían estado lidiando con ratas en su hogar durante meses, pero no tomaron medidas para proteger a sus hijos.  

Debido a esta negligencia, fueron arrestados y enfrentan cargos por conducta ilegal hacia un menor. Además, los tres hijos de la pareja fueron puestos bajo la custodia de los servicios de protección infantil mientras se desarrolla el proceso judicial. 

El caso ha generado indignación y puesto en evidencia la importancia de garantizar condiciones de vida seguras para los niños.  

Según la ley de Carolina del Sur, la conducta ilícita hacia un menor es un delito grave que puede conllevar hasta 10 años de prisión. La comunidad espera que este caso sirva como un llamado de atención para prevenir situaciones similares en el futuro. 

Mientras, la bebé continúa su recuperación en el hospital, sus padres aguardan su juicio programado para el 31 de julio. Se les ha prohibido el contacto con sus hijos a menos que los servicios de protección infantil lo autoricen. 

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