En un caso que ha conmocionado a la comunidad de Texarkana, en Texas (EEUU), una joven madre de 21 años, identificada como Jatoria Cleamons, enfrenta cargos por homicidio involuntario tras ser acusada de sumergir a su bebé de ocho meses en agua hirviendo.
Según informes policiales citados por Law&Crime, el trágico incidente ocurrió luego de que la mujer se frustrara por un pañal sucio.
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Como consecuencia el bebé, identificado como Courtlyn Cleamons, sufrió quemaduras graves y falleció dos semanas después.
Las autoridades informaron, que Cleamons, confesó durante un interrogatorio haber bañado a su hijo con agua extremadamente caliente. Actualmente, es buscada por las autoridades, según lo informado por la policía el pasado sábado.
Lo que se precisó, es que el menor murió el pasado 4 de febrero en una casa en Hooks, donde su madre se encontraba alojada con un familiar.
A pesar de los esfuerzos de los paramédicos, el bebé no pudo ser reanimado. La autopsia determinó que la causa de muerte fueron quemaduras por escaldadura.
Desde el fallecimiento del bebé, la policía ha estado investigando el caso como un homicidio. Detectives de Hooks y Texarkana concluyeron que las lesiones térmicas sufridas por el menor ocurrieron días antes, cuando aún vivía con su madre.

Cleamons, quien se encuentra prófuga desde que se emitieron las órdenes de arresto, publicó mensajes de duelo en redes sociales, expresando su supuesto amor y tristeza por la pérdida de su hijo.
“Descansa en paz, mi bebé… te amo y te extraño tanto que tengo el corazón destrozado”, escribió la acusada en las redes sociales.
De momento, las autoridades pidieron a la comunidad que, si tienen información sobre el paradero de Cleamons, se comuniquen de inmediato al 911.