Los republicanos de la Cámara de Representantes han propuesto un impuesto del 5 % sobre las remesas enviadas desde EEUU, una medida que afectaría a más de 40 millones de personas, incluidos titulares de permisos de residencia permanente y visas de trabajo.
De acuerdo con la información difundida por Univisión, este impuesto forma parte de un proyecto de ley respaldado por el presidente de EEUU, Donald Trump, quien también ha sugerido medidas adicionales para restringir el envío de dinero por parte de migrantes indocumentados.
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Sin embargo, la propuesta generó preocupación entre economistas y defensores de los derechos de los migrantes, quienes advierten sobre sus posibles consecuencias económicas y sociales.
Como se sabe, las remesas representan una fuente crucial de ingresos para muchas familias en países de América Latina y otras regiones.
En comunidades como Cajolá, en Guatemala, la economía local depende en gran medida del dinero enviado por trabajadores migrantes.
Expertos señalan que imponer un impuesto a estas transferencias podría reducir significativamente los fondos disponibles para estas familias, afectando su bienestar y estabilidad financiera.
Además, algunos economistas advierten que la medida podría generar un efecto contrario al deseado, incentivando una mayor migración hacia EEUU en busca de mejores oportunidades económicas.
Desde el punto de vista político, la propuesta se enmarca dentro de una estrategia más amplia de los republicanos para endurecer las políticas migratorias y reforzar la seguridad fronteriza.
El impuesto a las remesas se presenta como una forma de financiar exenciones fiscales y otras iniciativas de seguridad, pero sus críticos argumentan que penaliza injustamente a los trabajadores migrantes que contribuyen a la economía estadounidense.
Además, algunos analistas consideran que la medida podría afectar negativamente las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y los países receptores de remesas.
