Los migrantes indocumentados representarían un aporte multimillonario para las arcas de Estados Unidos, según el más reciente estudio del Instituto de Impuestos y Política Económica (ITEP, por sus siglas en inglés).
La contribución sería en forma de impuestos, de acuerdo a los datos suministrados en el mismo informe de la organización de política fiscal no partidista basada en Washington D.C.
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De hecho, se estima que hay unos 10,9 millones de personas sin documentos legales para trabajar en el país. Y, por cada millón de migrantes bajo esa condición, los servicios públicos reciben unos 8.900 millones de dólares por los trabajos realizados.
Esto último, estaría sucediendo mayoritariamente en economías inestables y trabajos mal remunerados en sectores como la construcción o la agricultura.
Incluso los estados de California, Texas, Nueva York, Florida, Illinois y Nueva Jersey recaudaron más de 1.000 millones de dólares cada uno de las contribuciones fiscales de indocumentados, según el reporte.
Además, si se le otorgara autorización de trabajo a todos aquellos que actualmente están sin documentos, las contribuciones aumentarían en 40.200 millones de dólares, hasta los 136.000 millones, calcula el estudio.
LATINOS INDOCUMENTADOS EN ESTADOS UNIDOS
Se estima que alrededor del 13 % de los 62 millones de latinos en Estados Unidos son indocumentados, según el Departamento de Seguridad Nacional, por lo que su impacto económico es igualmente importante.