Hay historias dignas de un guion de Hollywood como es el caso de dos hermanas gemelas estadounidenses quienes se reencontraron 81 años después gracias al destino y los avances de la ciencia.
Las mujeres, identificadas como Maurilia Chávez y Andrea López, ya cuentan con 90 años de edad y la última vez que se vieron en 1943, cuando tenían 9 primaveras.
El inesperado encuentro se dio después de que López se realizara pruebas genéticas en diciembre del año pasado y le informaran posteriormente que su hermana estaba viviendo en Denver.
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Las gemelas eran parte de una numerosa familia de 10 hermanos que quedaron huérfanos en 1937.
Tras este penoso hecho los menores fueron adoptados por varios miembros de su familia. Ellas crecieron a cientos de kilómetros de distancia, al no ser enviadas al mismo hogar.
Se vieron por última vez durante un encuentro familiar de un día y nunca más supieron la una de la otra.
Cada una vivió su propia vida y conformaron sus propias familias en diferentes estados de la nación norteamericana.
EMOTIVO ENCUENTRO
Después de hablar por teléfono se pusieron de acuerdo para verse y López voló al encuentro de su gemela.
“Mi hermanita, tenía muchas ganas de verte, de tenerte conmigo, mi hermanita hermosa”, le dijo Andrea al encontrarse de frente con Maurilia.
“Cuando veo a mi hermana, me pongo tan feliz que no hago nada más que llorar, abrazarla y aplastarla”, comentó López a los medios, según reseña RT.
“Es como si fuera la primera vez que la vi en mi vida porque 81 años es demasiado“, agregó al describir el encuentro.
“Soy la persona más feliz del mundo porque nunca pensé que la iba a volver a ver. Y la otra razón por la que lloro como un bebé es porque me sentí sola. Tengo una hermosa familia, pero lo que realmente necesito es a mi hermana”, dijo por su parte Chávez.
Tres de sus hermanos todavía están vivos, todos tienen entre 80 y 90 años. El encuentro de las gemelas las ha impulsado a querer reunirse con ellos, por lo que la historia continúa.