En la época actual, se ha vuelto habitual comer con el celular u otro tipo de dispositivo en la mano; sin embargo, sentirse acompañado por algún equipo de estos a la hora de las comidas puede causar problemas de salud en varios niveles.
En un principio, la nutricionista Juana María González explicó a La Vanguardia que ingerir alimentos viendo una pantalla afecta la saciedad. «Al no prestar atención a la comida, obviamos esos avisos, que son más débiles que los del hambre. Y es probable que comamos más», resalta.
Por su parte, la también nutricionista Laura Jorge refuerza esta idea y explica los motivos. «Esto ocurre porque no somos conscientes de lo que hacemos. El estómago y el cerebro dejan de estar conectados», advierte.
LAS CONSECUENCIAS
Esta situación podría provocar un aumento de peso en las personas. La razón es que cuando un individuo centra la atención de su cerebro en el celular, comenzará a sentir más hambre. Por ende, comerá más de lo que el cuerpo requiere.
Un estudio de la Unidad de Nutrición y Comportamiento de la Universidad de Bristol resalta que las personas engullen más comidas o porciones más grandes cuando se entretienen viendo una pantalla.
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Al ver hacia el monitor, no se le presta atención al masticar bien los alimentos. Esto provoca que la comida llegue menos procesada de lo necesario al estómago. Asimismo, devendrá en un procesamiento incorrecto de los alimentos, dando como resultado digestiones más pesadas.
Sumado a ello, el masticar rápidamente provoca que una persona trague más aire del que consumiría cuando no está viendo una pantalla. Esto genera hinchazón abdominal, flatulencia, dolencias en el área abdominal, entre otras causas.
