Esta semana, anunciaron el desarrollo de un fármaco anticonceptivo experimental para hombres que reduce de forma rápida y temporal la fertilidad masculina.
En el estudio coordinado por Jochen Buck del Weill Cornell Medicine en Estados Unidos lograron detener por unas horas el movimiento de los espermatozoides en ratones. El objetivo es que a futuro puedan desarrollar una píldora anticonceptiva para hombres.
La idea sería que los hombres tomen esta píldora poco antes del acto sexual. Asimismo, aseguraron que las personas recuperarían la fertilidad para el día siguiente.
LO QUE REVELÓ UN ESTUDIO SOBRE LOS ESPERMATOZOIDES
Los inhibidores solubles de una enzima llamada adenilil ciclasa (sAC) pueden reducir la motilidad de los espermatozoides en ratón y en humanos, reseñó el medio 20 Minutos.
De esta forma, no podrán impulsarse hacía adelante ni madurar. Los estudios concluyeron que los espermatozoides permanecen inmóviles durante una hora y media. A las tres horas, algunos espermatozoides empiezan a recuperar la motilidad y a las 24 horas, casi todos han recuperado el movimiento normal.
LEA TAMBIÉN: EL EXTRAÑO CASO QUE SORPRENDE A LOS MÉDICOS, UN JOVEN DE 19 AÑOS FUE DIAGNOSTICADO CON ALZHEIMER
Durante las primeras dos horas la eficiencia anticonceptiva era del 100%. Mientras que en las primeras tres horas fueron del 91%.
Asimismo, detallaron que no observaron efectos negativos para la salud cuando estos fármacos se administraron de forma continuada durante seis semanas.
«Todos los demás anticonceptivos masculinos experimentales hormonales o no hormonales tardan semanas en reducir el recuento de espermatozoides o incapacitarlos para fecundar óvulos», indicó a EFE Melaine Balbach una de las investigadoras.
El equipo de investigación está trabajando para desarrollar fármacos inhibidores de sAC que sean eficaces y seguros para su uso en humanos.
Además, los investigadores también están planeando realizar experimentos en otro modelo de animal para validar los resultados obtenidos en ratones. Estos experimentos proporcionarán la evidencia necesaria para que los ensayos clínicos en humanos se lleven a cabo con seguridad y eficacia.