El presidente de Chile, Gabriel Boric, endureció el jueves su política hacia los migrantes y les exigió regularizar su estadía. En caso de que no obtengan los papeles, aseguró que su gobierno los expulsará del país.
Durante una gira por el norte de Chile, Boric se pronunció sobre la ola migratoria en la zona. En tal sentido, el presidente chileno aseguró que ofrecerá alternativas para los migrantes, pero subrayó que es obligatorio que regularicen su situación.
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“Hay que hacer el catastro, ofrecer alternativas, a quienes estén en situación irregular, o se regularizan o se van, y a quienes hayan cometido delitos, derechamente se tienen que ir. Acá no hay nadie que vaya a estar encima de la ley”, expuso.
Asimismo, Boric puso foco a la crisis migratoria en el norte de Chile y reconoció la inseguridad que afecta la zona desde hace meses. “La respuesta es más complicada, es intersectorial”, agregó el mandatario.
BORIC EXHORTÓ A AUTORIDADES
Asimismo, el mandatario dijo que el Ministerio de Salud y la cartera de Educación deben atender a los migrantes. Por tanto, dijo que la delegada presidencial de Antofagasta, Karen Behrens, articulará esos procedimientos.
«Es un trabajo que tiene como prioridad nuestra delegada, que va a hacer este trabajo intersectorial con (el Ministerio de Salud). En caso de que haya niños, tenemos que garantizar que tengan acceso a la educación”, dijo Boric.
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Igualmente, el presidente reconoció el aumento de migrantes en las localidades del norte de Chile y instó a Desarrollo Social a tomar medidas. “Los albergues hoy están copados en Antofagasta”, explicó Boric, aunque no brindó cifras oficiales.
La migración irregular no es un fenómeno nuevo en Chile. Sin embargo, hubo un severo aumento, puesto que en 2010 fueron tan solo 415 personas, mientras que en 2021 fueron 23.000, en su mayoría venezolanas.
