Los habitantes de la localidad de Pelileo, en Ecuador, hicieron una protesta para exigir que los migrantes venezolanos se vayan y dieron un ultimátum de apenas 72 horas para que abandonen el lugar.
La protesta fue organizada por las Juntas del Campesinado y líderes populares de la parroquia de Salasaca. «Tienen 72 horas para irse los venezolanos. Bien clarito. Se van de aquí de Pelileo», dicen en algunos mensajes.
Los videos de las protestas se viralizaron en las redes sociales. En las imágenes se puede ver cómo arrastran a muñecos que representan a los venezolanos, mientras exigen que abandonen la localidad de 20.000 habitantes.
En Pelileo, Ecuador, amenazan a los venezolanos con que tienen 72 horas para salir de la localidad.
En la marcha estuvo presente el alcalde de la ciudad, Gabriel Zúñiga.
Sin palabras. pic.twitter.com/Q7Y9UJmjEp
— Emmanuel Rincón (@EmmaRincon) December 6, 2023
La activista y defensora de los Derechos Humanos, Betzabeth Jaramillo, denunció esta protesta y la condenó. «Mujeres y niños migrantes enfrentan una situación preocupante», dijo, a la vez que exigió a las autoridades tomar medidas.
«Es especialmente preocupante que el alcalde local, Gabriel Zúñiga, haya acompañado las manifestaciones en rechazo de los extranjeros y migrantes, lo que agrega un nivel de legitimación a estas acciones discriminatorias», dijo Jaramillo.
Desde @yoteapoyoec advertimos lo que podría desencadenar una marcha nada pacífica contra los venezolanos y migrantes en #Pelileo. 🚨🇪🇨@ReporteYa @EmmaRincon @AlbertoRavell @la_patilla @CaraotaDigital https://t.co/0UetgHZAKO
— Betzabeth Jaramillo (@betzaj) December 6, 2023
¿POR QUÉ QUIEREN EXPULSARLOS?
Medios ecuatorianos indicaron que la protesta es para rechazar los crímenes que han alterado la tranquilidad de Pelileo. Según los manifestantes, la delincuencia se incrementó tras la llegada de los venezolanos.
Los vecinos indicaron que están cansados de extorsiones y asaltos. Además, la activista Jaramillo precisó que las protestas comenzaron a organizarse en noviembre, cuando un venezolano habría matado a un policía.
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Enrique Silva, presidente de la Federación de la Junta del Campesinado, afirmó que la protesta no es contra los trabajadores venezolanos. Sin embargo, afirmó que no permitirán la llegada de personas que causen «daños» a los locales.
Activistas denunciaron la protesta y, junto a Jaramillo, exigieron que las autoridades luchen contra la discriminación. Además, aseguraron que los migrantes están en riesgo por la xenofobia.