Los cuerpos de los siete migrantes venezolanos que murieron en el incendio del Instituto Nacional de Migración de Ciudad Juárez, México, podrían termina en una fosa común. Esto se debe a que ninguna delegación venezolana o familiares han ido ante las autoridades mexicanas a reclamarlos.
La Fiscalía General del estado de Chihuahua y el Servicio Médico Forense (Semefo) informaron que los cadáveres podrían resguardarse por más de un año. No obstante, si se cumple ese periodo y siguen sin ser requeridos, los enviarán a una fosa común de la ciudad.
Esto, siempre y cuando primero se le tomen muestras fotográficas, dactilares y genéticas. Con estos elementos, pueden entregarse en un futuro, en el caso que aparezca alguien a reclamarlos.
Funcionarios del Semefo destacaron que hay casos donde los cuerpos permanecen resguardados hasta cuatro años después. Luego, los mandan a la fosa común para que tengan descanso eterno.
VENEZUELA, EL ÚNICO PAÍS QUE NO HA REPATRIADO A SUS MIGRANTES FALLECIDOS
De hecho, representantes de Colombia, Honduras, Guatemala y El Salvador sí llevaron a cabo el procedimiento necesario para reclamar a sus compatriotas. Esto quiere decir que solo las autoridades Venezolanas no han repatriado a los suyos, según El Heraldo de Juárez.
Los cuerpos de los migrantes venezolanos que permanecen en la medicatura forense son: Joel Alexander Leal Peña, Orangel José López Guerrero, Orlando José Maldonado Pérez, Óscar José Regalado Silva, Rafael Mendoza Mendoza, Rannier Edelber Requena Infante y Samuel José Marchena Guilarte.
El incendio que dejó 40 migrantes muertos aún deja incógnitas acerca de cómo sucedió, así como las posibles negligencias y la responsabilidad del Estado.
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Según el relato oficial, el fuego lo iniciaron los propios migrantes al quemar unos colchones como protesta al enterarse de que iban a deportarlos.
Horas después del suceso se filtró un video que en 32 segundos muestra cómo los agentes a cargo del centro de detención huyeron del lugar. Precisamente, sin atender a los migrantes, mientras la estancia se llenaba de humo.
