A pocos días de las elecciones presidenciales en Venezuela, el Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil decidió enviar a dos representantes para monitorear el proceso electoral que se llevará a cabo el próximo 28 de julio.
Los designados para esta misión son Sandra Damiani, directora de la Asesoría de Gestión Electoral del TSE, y José de Melo Cruz, jefe de la Coordinación de Sistemas Electorales. Esta información la confirmó la Justicia Electoral brasileña en una notificación enviada al Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.
El TSE no ha ofrecido detalles sobre las razones detrás de su cambio de postura. En junio, el tribunal había generado polémica al rechazar la invitación de Venezuela, luego de que el chavismo excluyera a la misión de observación de la Unión Europea.
De acuerdo con lo pactado en Barbados, el chavismo debía permitir observadores internacionales en el proceso electoral. Por lo cual, siguieron insistiendo tanto con Brasil, como con Colombia, que sigue evaluando la invitación tras rechazarla inicialmente.
POSTURA DE BRASIL ANTE VENEZUELA
El pasado 9 de julio, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, subrayó la importancia de la “normalización de la vida política” en Venezuela para la estabilidad de Suramérica. Durante un discurso, pidió que la comunidad internacional respete los resultados de las próximas elecciones.
En este sentido, Gisela Padovan, secretaria para América Latina y el Caribe de la cancillería, también coincidió en este punto. “Brasil quisiera que Venezuela se reintegre al Mercosur y a la comunidad internacional como un todo”.
LEA TAMBIÉN: DELEGACIÓN DEL PP DE ESPAÑA ACEPTÓ INVITACIÓN DE MARÍA CORINA Y VENDRÁN A OBSERVAR ELECCIONES DEL 28J
Padovan mencionó la posibilidad de que el Parlamento del Mercosur (Parlasur) envíe una misión para las elecciones del 28 de julio, destacando la importancia de que el número de observadores sea “el más amplio posible” para reforzar la legitimidad del proceso.
“Queremos un Mercosur de seis”, añadió, refiriéndose a los países fundadores del bloque —Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay— junto con Bolivia, que está en proceso de adhesión.
Venezuela está suspendida del Mercosur desde 2017 debido a la falta de ratificación de muchas de las normas internas del bloque y a violaciones de la cláusula democrática.