Un estremecedor crimen sacudió a la comunidad de Tampa, en Florida (EEUU), donde Jessica Rivera, una madre venezolana de 40 años, terminó asesinada junto a un hombre de 37 años (no identificado) en la residencia del presunto agresor, Louis Jules, de 59 años.
El hecho ocurrió en la mañana del viernes pasado en Portal Drive, y dejó una profunda consternación en sus familiares, especialmente en su hijo, quien envió un desgarrador mensaje a la venezolana asesinada: “Si tú regresas yo me porto bien”.
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Lo que precisó Jannet Barón, prima de la venezolana asesinada, es que esta había emigrado a Estados Unidos junto a su hermana, ambas alojadas en la casa de Jules, quien presuntamente las había traído al país hacía aproximadamente un año.
Según Barón, las mujeres ya no querían vivir en esa residencia, lo que habría desencadenado el violento episodio.
Asimismo, relató que el día del crimen recibió una llamada de la hermana de Jessica, quien le confesó entre lágrimas que Jules había matado a su pariente.
La noticia provocó una reacción de desesperación: “Me volví loca, le pegué a las paredes, a las puertas. Les decía a mis hijos, no lo podía creer”, expresó.
El dolor se intensificó al conocer que el hijo de Jessica, no comprendía la magnitud de la tragedia y solo pedía el regreso de su madre.
¿QUÉ SE SABE SOBRE EL ACUSADO?
Las autoridades de Tampa arrestaron a Louis Jules menos de ocho horas después del crimen. El sospechoso fue presentado ante un juez y enfrenta dos cargos de asesinato en primer grado con premeditación, además de uno por manipulación de evidencia física relacionada con un delito capital.
La investigación continúa para esclarecer los motivos detrás del doble homicidio, mientras la comunidad exige justicia y protección para los familiares sobrevivientes.
DETALLES INQUIETANTES
De acuerdo con Fox 13 Tampa Bay, la venezolana sostenía su celular mientras procesaban su cuerpo. Los detectives descubrieron que estaba grabando un video que todavía se reproducía.
Al procesar el video, vieron que ella y la otra víctima fueron confrontadas por un hombre negro (posiblemente Jules) con gafas de sol, polo, pantalones grises y zapatos negros. El hombre sostenía una taza y las llaves del auto. El video muestra al hombre abriendo la puerta trasera del pasajero de la camioneta.
El hombre y la mujer confrontaron al sospechoso hablándole en español. Un intérprete precisó que le dijeron: «¡Oye, no puedes entrar en mi coche!».
Además, el video muestra al hombre arrojando el vaso con líquido a la víctima masculina, y mientras este último reaccionó a la defensiva, el sospechoso sacó una pistola oculta y le disparó.
La mujer gritó y se retiró al interior del vehículo, y el video registró varios disparos más. El video muestra al sospechoso de pie junto a la mujer con el arma antes de desaparecer.
¿POR QUÉ LOS MATÓ?
Según documentos judiciales, el acusado se identificó en el video. Durante el interrogatorio, afirmó haber vendido la camioneta Chevy blanca que estaba en la escena del crimen a las víctimas. Aseveró que no le habían pagado el vehículo, y su propósito era obtener el dinero por él.
Según los documentos, aseguró haber intentado subir al vehículo para acompañar a la pareja a un cajero automático a sacar dinero. Fue entonces cuando ocurrió el enfrentamiento.
¿QUÉ SIGUE?
Jules compareció ante el tribunal el lunes. Sin embargo, debe regresar el jueves. En tanto, la Fiscalía Estatal presentó una solicitud de prisión preventiva en este caso.
Al menos hasta el jueves, Jules permanecerá recluido en la Cárcel del Condado de Hillsborough sin derecho a fianza.
