Después de las agresiones que sufrieron los jugadores de la Vinotinto de parte de la policía de Perú al término del encuentro con la selección inca, trascendió que el combinado peruano podría ser sancionado con entre tres y seis puntos, lo que prácticamente los condenaría a no ir al Mundial.
Luego de los maltratos contra los futbolistas criollos, la Conmebol encendió las alarmas. Por medio de un comunicado, condenó los ataques; pero aclaró que no tiene competencia para sancionar. Eso, señalaron, le corresponde a la FIFA.
«La Conmebol condena toda forma de violencia. Cooperará siempre con acciones que apunten a desterrar la violencia, el racismo, la xenofobia y la discriminación», dice parte de la misiva.
En otro párrafo, mencionan que no son «organizadora de las clasificatorias a la Copa del Mundo. La elaboración de las normas que rigen la clasificatoria, así como la decisión de abrir una investigación y la aplicación de eventuales sanciones, son atribuciones exclusivas de la FIFA».
¿QUÉ DICE EL REGLAMENTO?
Es allí donde entraría en juego el máximo regente del fútbol. En su estricto reglamento en casos de discriminación, es donde se pone fea la cosa para Perú. La ordenanza dicta que el dos veces campeón de Copa América podría perder entre tres y seis unidades. Ello en caso de que el hecho se considere grave, según Antena 2.
«Toda persona que atente contra la dignidad o la integridad de un país, una persona o un colectivo de personas empleando palabras o acciones despectivas, discriminatorias o vejatorias por motivos de raza, color de piel, origen étnico, nacional o social, género, discapacidad, orientación sexual, lengua, religión, posicionamiento político o de cualquier otra índole, poder adquisitivo, lugar de nacimiento o por cualquier otro estatus o razón será sancionada con una suspensión que durará al menos diez partidos o un periodo determinado, o con cualquier otra medida disciplinaria adecuada», reza el código de conducta.
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Tal situación escaló a lo político. Nicolás Maduro arremetió contra el gobierno peruano al llamarlo «oligarcas», además de xenófobos y envidiosos. Esto último, porque la selección de Perú va de última en la tabla y la Vinotinto cuarta.
Como respuesta, el ministro de Salud peruano le dijo a Maduro que es mejor estar en el fondo en deportes que en economía.
