Excelente, emocionante, espectacular, son algunas de las expresiones que repitieron una y otra vez los padres y representantes para describir las Mini Olimpiadas Especiales que se llevaron a cabo con los niños de la Fundación Frigilux en honor al Día Internacional de las Personas con Discapacidad, decretado por las Naciones Unidas.
Más de 70 pequeñines con diversidad funcional, quienes forman parte de los programas de atención de la Fundación Frigilux, protagonizaron este memorable evento desarrollado en las instalaciones deportivas del Campo Seca Sports Palma Real de Naguanagua, estado Carabobo y cuyo lema fue: «No dejar a nadie atrás».
Los chicos demostraron que son capaces de lograr todo lo que se propongan y así participaron con mucho entusiasmo y gran ánimo en cinco disciplinas: Gateo y arrastre, Carrera de obstáculos, Lanzamiento de peso, Salto largo y Carrera de relevo y velocidad.
Padres admirables como María Bertrán, acompañada por su hijo Hans de 9 años, con síndrome de down y con una medalla encima por su participación en esta actividad, exaltaron la importancia que tiene en sus vidas este tipo de experiencias.
«Esto es excelente, mi hijo hizo la competencia y allí está brincando y saltando. Nuestra experiencia con la Fundación ha sido espectacular, la compenetración que hay ha sido fundamental», expresó.
Igualmente lo hizo Elsy Mota, junto a su hija Emma, quien padece de artrogriposis múltiple en miembros superiores. Está muy agradecida por el apoyo que ha recibido de Frigilux al ver la gran evolución que ha tenido su hija.
«Super emocionada de ver estos eventos que hace la Fundación, yo tuve la oportunidad de ver desde la primera vez que hicieron algo deportivo y siempre los niños lo disfrutan muchísimo y a uno le fascina ver como ellos se empeñan en dar lo mejor. Da mucho orgullo ver a niños dándolo todo, a veces en sillas de rueda o con alguna férula, y siguen adelante. Estoy muy contenta», contó.
Yaser Dagga, presidente de la Fundación Frigilux, habló del compromiso que asumen con esta labor social que tiene como objetivo promover el deporte infantil inclusivo, de una forma divertida y alegre.
«Queremos que todos nuestros niños tengan las mismas oportunidades que los demás niños del mundo. Estas actividades son muy bonitas y llenan nuestros corazones. Estamos muy felices de seguir siendo parte de momentos tan importantes para ellos y que aportan tantos cambios positivos en sus vidas», comentó.
El equipo de la Fundación, conformado por más de 30 integrantes, entregó su alma para lograr el éxito de estas Mini Olimpiadas, que se reton por primera vez luego de la pandemia y que aparte de su fin recreacional cumplieron un papel terapéutico que favorece el aprendizaje, estimula las capacidades motoras y motiva el trabajo en equipo de los niños, tal y como lo explicó, Adriana Pastrán, directora de la organización, muy conmovida por todos los alcances obtenidos.