Son muchas las películas o series donde se emplea el uso del sueño criogénico con el fin de alargar la vida del personaje. Esto mismo es lo que anhela Dennis Kowalski, un hombre que pagó 100 mil dólares para que lo congelaran a él y su familia. Esto, con la esperanza de despertar «en un futuro mejor».
Pero lejos de sonar como loco, Kowalski es un entendido del tema. Él es un respetado empresario estadounidense, el cual dirige Cryonics Institute, organismo especializado en este ámbito, ubicado en el estado de Michigan, Estados Unidos (EEUU).
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Sin embargo, la ambición del hombre data desde su niñez. Confesó que sacó dicha idea de un programa que miraba de chico, por lo que estudio sobre ello.
Una de los ejemplos más populares sobre programas que tratan la criónica es Futurama. En esa serie animada Fry, el protagonista, es congelado por accidente en 1999 y despierta en el año 3000.
LA CRIÓNICA: ¿QUÉ ES?
El concepto universal de la criónica indica que es «la práctica de preservar a seres humanos y animales a temperaturas criogénicas con la esperanza de que la ciencia futura pueda devolverles un estado de vida saludable, así como rejuvenecerlos».
Este proceso de preservación consta de congelar el cuerpo a una temperatura muy baja, frecuentemente, por debajo de -195 grados Celsius. En ese punto, se paraliza toda la actividad biológica del cuerpo y se evita la muerte de las células.
Según Clarín, Kowalski confía que en un siglo, habrá una tecnología más avanzada la cual pueda revivir «de entre los muertos». Asimismo, afirmo que «nadie conoce el futuro. Es imposible saberlo con seguridad«.
«No tienes nada que perder conservando tu cuerpo después de la muerte, pero potencialmente todo que ganar», añadió.
Por último, explicó que habló esto con su mujer y tres hijos. Todos firmaron para que preserven sus cuerpos y «lo entienden». «Están de acuerdo en que la posibilidad de despertar, aunque sea escasa, merece la pena. También son bastante optimistas sobre el futuro», apuntó.
