Gavan Rogers, de 24 años, quedó arrestado después de que las enfermeras del Hospital Witham en Estados Unidos encontraran múltiples marcas de dientes en el cuerpo de su bebé recién nacida. Las profesionales de la salud también le encontraron hematomas en varias áreas del cuerpo.
Según los informes, Rogers mordía a su hija con fuerza excesiva y le gritaba palabras ofensivas como “pequeña perra”, “desagradecida” y “malvada”. Además, en presencia de las enfermeras sacudía a la bebé cuando lloraba, lo que indica una clara falta de paciencia y control emocional.
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El detective encargado indicó que “estas lesiones solo podrían haber sido infligidas con el uso de fuerza excesiva, lo que habría causado un dolor severo a la víctima”.
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La bebé fue trasladada al Hospital Infantil Riley en Indianápolis y se le informó al Departamento de Policía de Whitestown para que investigara el caso.
Un médico del hospital infantil informó que la niña tenía hematomas en los antebrazos, estómago, hombros, una rodilla y la pierna. Cuando el padre fue interrogado, afirmó que eran «mordiscos de amor», pero que quizás fueron con demasiada fuerza.
Actualmente, se espera que Rogers se presente ante la jueza del condado de Boone, Lori Schein, el próximo viernes para su audiencia inicial.
