El exgrandesligas venezolano Alex Herrera falleció este jueves a la edad de 43 años, después de luchar con una enfermedad. Durante su trayectoria, disputó 17 temporadas en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) y jugó dos años en las Grandes Ligas con los Indios de Cleveland.
Herrera falleció en Maracaibo después de estar internado en un hospital en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui.
Trascendió que el beisbolista falleció por un aneurisma aórtico y una disección aórtica. Estas afecciones cardíacas provocaron un infarto fulminante, reseñó el diario Meridiano.
Debido a su condición requería de una intervención quirúrgica a corazón abierto. Sin embargo, debido a la inestabilidad de la enfermedad nunca se la pudieron realizar.
Herrera fue uno de los mejores jugadores de béisbol del país durante la década de los 2000. Su muerte ha causado una gran conmoción en el mundo del deporte. Se le recuerda por su talento, su destreza, su dedicación y su espíritu competitivo.
Dejó un récord de 32-38, con 4.34 de efectividad en 304 juegos, dando 252 boletos y 476 ponches.
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¿QUÉ ES UN ANEURISMA AÓRTICO?
El aneurisma aórtico que aparentemente sufría Herrera es una anormalidad en la pared de la aorta, que es la principal arteria del cuerpo. Esta anormalidad generalmente se debe a una debilidad en la pared de la aorta, lo que provoca que el músculo y el tejido conectivo se estiren y se vuelvan más delgados.
Esto hace que la aorta se abra en una bolsa, lo que a su vez causa una presión anormalmente alta en la aorta y la zona alrededor, lo que puede dañar el tejido circundante y provocar complicaciones. El tratamiento de un aneurisma aórtico generalmente implica una cirugía para reparar el área afectada.
¿QUÉ ES UNA DISECCIÓN AÓRTICA?
La disección aórtica es una afección grave en la que se produce un desgarro en la capa media de la pared de la aorta. Esto provoca una separación entre las capas que forman la pared de la aorta, permitiendo que la sangre se acumule entre ellas y se forme una falsa luz.
Esta falsa luz se expande y afecta al flujo sanguíneo, lo que puede causar dolor intenso, presión arterial baja, insuficiencia cardíaca, accidente cerebrovascular o incluso la muerte. El tratamiento generalmente incluye cirugía, medicamentos para disminuir la presión arterial y cambios en el estilo de vida.
