El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, declaró «desastre mayor» en Texas, debido a las poderosas inundaciones que han dejado hasta el momento 68 muertos y decenas de desaparecidos, entre ellos 11 niñas de un campamento arrasado por el agua.
«Acabo de firmar una Declaración de Desastre Mayor para el Condado de Kerr, Texas, para garantizar que nuestros valientes socorristas cuenten de inmediato con los recursos necesarios», escribió Trump en sus redes sociales tras firmar la emergencia.
Asimismo, aseguró que su administración «continúa trabajando en estrecha colaboración con los líderes estatales y locales».
En este sentido, recordó que la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, estuvo el sábado «en el terreno» con el gobernador de Texas Greg Abbott.
«Nuestra increíble Guardia Costera de EEUU, junto con los socorristas estatales, ha salvado más de 850 vidas. ¡Que Dios bendiga a las familias y a Texas!», culminó Trump su mensaje.
CONDADO DE KERR EL MÁS AFECTADO HASTA EL MOMENTO
Hasta el momento, la zona más afectada ha sido el condado de Kerr, donde han fallecido al menos 59 personas.
Le sigue el condado Travis, con cuatro personas fallecidas y el de Burnet, donde hay tres muertos hasta ahora.
Por su parte, en los condados de Kendall y Williamson han reportado un fallecido, cada uno, y anunciaron que siguen en la búsqueda de los desaparecidos.
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El juez del condado Williamson, Steven Snell, dijo que continúan los esfuerzos para encontrar a dos personas desaparecidas en la mencionada localidad, ubicada al norte de Austin.
Agregó que las autoridades están comenzando a pasar a una fase de recuperación y están planificando una evaluación formal de los daños en la región.
Mientras tanto, las operaciones de búsqueda y rescate continúan en el condado de Hunt, donde no se han reportado fallecidos y donde los voluntarios dicen mantener la esperanza de poder encontrar sobrevivientes, a pesar de que las autoridades advierten que la probabilidad disminuye con el paso de las horas.