Entre basura y animales muertos dentro de su casa, así encontraron el cadáver esquelético de exdetective

Luis Alfredo Ledezma
3 Min de Lectura
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Cortesía

Durante más de siete meses, el paradero de Mary Notarangelo, una exdetective retirada de 73 años del Departamento de Policía de Bridgeport (EEUU), fue un misterio que inquietó a su comunidad.  

De acuerdo con NBC News, la última comunicación de la exdetective fue un mensaje de texto en junio de 2024, en el cual mencionaba dolores abdominales, vómitos y una caída. 

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A partir de ahí, el silencio. No fue sino hasta febrero de 2025 que las autoridades lograron ingresar a su vivienda en Glastonbury, en Connecticut. Descubrieron su cuerpo en estado esquelético, sepultado bajo una montaña de basura y escombros cerca de la entrada principal. 

El caso ha estremecido tanto por su desenlace como por las condiciones en las que fue hallado el cuerpo.  

La vivienda presentaba signos extremos de acumulación compulsiva: basura apilada hasta casi dos metros de altura, jaulas con aves muertas, ratones vivos y un ambiente tan insalubre que fue necesario el uso de maquinaria pesada.

También se utilizaron drones y equipos especializados en materiales biohazard para poder avanzar en la búsqueda.  

Incluso, un perro entrenado para detectar restos humanos, fue parte del operativo. 

Las autoridades habían intentado ingresar a la casa desde julio de 2024, pero la densidad de los desechos lo impedía.  

NO SE DETERMINÓ LA CAUSA DE MUERTE 

Solo tras una segunda intervención, de un equipo profesional de limpieza, se logró acceder al área donde yacía el cuerpo de Notarangelo.  

La oficina del médico forense no pudo determinar la causa de la muerte. Esto, según explicaron, debido al avanzado estado de descomposición, lo que añade un velo de incertidumbre a un caso ya de por sí desconcertante. 

Amigos y excolegas describieron a Mary como una mujer devota y amante de las aves, pero también señalaron que en sus últimos años se volvió más reservada.  

Su caso ha sido calificado por el jefe de policía de Glastonbury, Marshall Porter, como “trágico y muy extraño”, y ha abierto un debate especulativo sobre la salud mental, el aislamiento social y la acumulación compulsiva. 

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