Conmoción en Ohio: Abuelita de 73 años murió tras ser atacada por dos pitbulls drogados con cocaína

Valentín Romero
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Conmoción en Ohio: Abuelita de 73 años murió tras ser atacada por dos pitbulls drogados con cocaína
Foto: Cortesía Funeraria Oliver-Cheek

Conmoción es lo que viven los habitantes de Ashville, Ohio, luego de que una abuelita de 73 años resultó muerta tras el brutal ataque de dos perros pitbulls, quienes habrían estado bajo los efectos de la cocaína.

La víctima, identificada como JoAnn Echelbarger, se encontraba en su jardín junto a su esposo, cuando sufrió el brutal ataque. Lamentablemente el hombre, quien responde al nombre de Stanley, sufre demencia y está en silla de ruedas, por lo que no pudo ayudar a su esposa.

A pesar de los esfuerzos de la policía, la cual llegó con prontitud al sitio y disparó contra los animales, uno de ellos continuó atacando a la víctima hasta que fue demasiado tarde, según detalló el New York Post.

Los perros pitbulls eran propiedad de los vecinos de la mujer, por lo que ambos se encuentran detenidos.

Sin embargo, este trágico evento desencadenó otra serie de acciones legales contra el administrador de la perrera local y el complejo de condominios donde residían los dueños de los animales, reseñó la revista People.

INFORMES PATOLÓGICOS CONFIRMARON PRESENCIA DE COCAÍNA EN LA SANGRE DE LOS CANES

Los informes patológicos confirmaron la presencia de cocaína en los sistemas de los animales, factor clave en la demanda presentada por la familia de Echelbarger.

De acuerdo con NBC4, los propietarios de los canes, Adam Withers y su madre Susan Withers, se declararon culpables por homicidio involuntario en relación con la muerte de Echelbarger.

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No obstante, la familia de la víctima presentó una demanda por muerte injusta, alegando negligencia por parte de los dueños de los perros, la asociación de propietarios del condominio y el guardián de perros del condado.

Según la demanda, hubo múltiples advertencias y órdenes para retirar a los perros del complejo, las cuales no fueron cumplidas.

Este caso generó un debate sobre la responsabilidad de los dueños de mascotas y la eficacia de las autoridades locales en la gestión de situaciones potencialmente peligrosas.

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