La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés) del Departamento de Trabajo de los Estados Unidos propuso una nueva norma para abordar los peligros del calor excesivo en el lugar de trabajo.
La propuesta significa un paso importante para proteger a los trabajadores de los riesgos relacionados con el calor, que pueden incluir enfermedades por calor, agotamiento por calor e incluso la muerte.
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La norma propuesta requiere que los empleadores tomen medidas para proteger a sus trabajadores del calor excesivo, incluyendo:
- Identificar y evaluar los peligros del calor: Los empleadores deben identificar los trabajos y los lugares de trabajo que son más propensos a tener peligros de calor, y evaluar la exposición de los trabajadores a estos peligros.
- Desarrollar e implementar un plan de respuesta al calor: El plan debe incluir procedimientos para prevenir enfermedades relacionadas con el calor, responder a emergencias por calor y capacitar a los trabajadores sobre los peligros del calor.
- Proporcionar capacitación a los trabajadores: Los trabajadores deben recibir capacitación sobre los peligros del calor, los signos y síntomas de las enfermedades relacionadas con el calor, y los procedimientos de respuesta a emergencias por calor.
- Monitorear las condiciones de calor: Los empleadores deben monitorear las condiciones de calor en los lugares de trabajo y tomar medidas para controlar el calor cuando sea necesario.
- Proporcionar acceso a agua potable y sombra: Los trabajadores deben tener acceso a agua potable y a áreas con sombra para refrescarse.
¿A QUIÉNES APLICA?
La norma propuesta se aplica a todos los empleadores en los Estados Unidos que tienen uno o más empleados. Esto incluye a los del sector público y privado, así como a las empresas de cualquier tamaño.
LO QUE SE ESPERA
La OSHA está aceptando comentarios sobre la norma propuesta hasta el 1 de agosto de este mismo año.
Después de revisar los comentarios, la OSHA finalizará la norma y publicará la regla final.
Lo que se estima, es que la norma final entrará en vigencia un año después de su publicación.
Sin dudas, se trata de un paso fundamental. Tomando en cuenta, que se estimó que 2.300 personas murieron en los Estados Unidos por problemas de salud asociados al calor en 2023.