Los virus o malware que pueden dañar los equipos electrónicos y poner en riesgo nuestra información personal, siguen evolucionando, lo que hace que algunos antivirus resulten obsoletos sin las continuas actualizaciones que estos ofrecen.
Uno de ellos es la esteganografía, que al día de hoy es usada para ocultar información en un mensaje, lo que hace susceptible a usuarios del espectro digital de abrir un archivo que venga encriptado con algún virus o algoritmo que termine generando riesgos en la seguridad digital.
La esteganografía consiste en hacer invisible la información clandestina al ojo humano. Esto despierta preocupación, ya que se utiliza para incrustar malware en archivos comunes tales como imágenes, videos y documentos.
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Esta técnica se estableció como un desafío considerable en la protección contra estos archivos maliciosos, usados por ciberdelincuentes para infiltrarse en un dispositivo sin que el afectado se dé cuenta.
Esto se debe a que el método en cuestión, desaparece cualquier indicio de la presencia de un código malicioso mediante la modificación minuciosa de los bits en un archivo, sin alterar su apariencia original.
Este avance marca una evolución en la percepción común respecto a los portadores de malware. Asimismo, extiende la amenaza más allá de archivos ejecutables hacia documentos y, crucialmente, archivos multimedia.
REDES SOCIALES VULNERABLES
Este tipo de ataque adquiere particular relevancia en el contexto de las redes sociales. Estas plataformas resultan vulnerables al facilitar el intercambio masivo de fotos y otros contenidos multimedia, según reseña Infobae.
Ejemplos alarmantes se han visto en la sociedad como imágenes que, siendo estéticamente inofensivas, portan scripts diseñados para ejecutar acciones maliciosas. Estos incluyen a una simple foto o meme, que infectan el equipo una vez que son descargadas o vistas, bajo condiciones específicas.
Técnicas como estas, que permiten el camuflaje de malware en archivos que aparentan ser inofensivos, plantea un desafío significativo.
Los usuarios y sobre todo los diseñadores de los sistemas operativos de los equipos electrónicos deben conocer sobre estos métodos. De esta manera pueden desplegar medidas de protección adecuadas para preservar la integridad de nuestros sistemas y la privacidad online.
