La Guardia Costera del Caribe detuvo durante los últimos días a más de 60 «balseros» venezolanos que intentaban entrar a Aruba, después de que pagaron hasta 600 dólares para cruzar el mar y llegar hasta la isla neerlandesa.
Las autoridades de Aruba precisaron que primero detuvieron a 28 migrantes el pasado miércoles, 27 de septiembre. Poco después, el 2 de octubre, capturaron a otras 38 personas en una segunda embarcación.
Los 66 migrantes pagaron dos viajes clandestinos que salieron de la Península de Paraguaná, en el estado Falcón. El plan era eludir a las autoridades fronterizas e ingresar irregularmente a Aruba.
La mayor parte de los detenidos son hombres falconianos, quienes sufren las consecuencias de la crisis económica. Se trata de jóvenes y padres que buscan opciones para aumentar sus ingresos o reencontrarse con sus familiares en la isla.
CIENTOS DE DÓLARES POR EL VIAJE
El portal Crónicas del Caribe apuntó que los migrantes pagan hasta 600 dólares por el pasaje para abordar una lancha que los lleve a Aruba. En caso de que lleven a otro pasajero, reciben un descuento y cancelan 500 dólares.
«Muchas veces nos dicen que vamos a salir y uno se lleva el celular, los papeles que tenga y ya. La mayoría viaja sin maleta porque al lanzarte al mar, hay que estar con lo menos posible porque es un oleaje fuerte», dijo un hombre que espera hacer el viaje.
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El hombre reconoció que es una travesía peligrosa, pero la crisis económica no le deja otra opción. «Más miedo me da que mis hijos se mueran de hambre. Tengo que sacarlos del pueblo porque ni la escuela sirve», explicó.
Mientras tanto, la Secretaría de Seguridad del estado Falcón hace patrullajes en la franja costera de la entidad y han encontrado combustible y embarcaciones abandonadas que usan para este tipo de viajes clandestinos.